Mis amigos siempre me dicen de lo maravilloso que sería si tuviera hijos. Que cómo sus pequeños bodoques son tan adorables que podrían comérselos, que cómo les dan tanta felicidad, que cómo se quedan dormidos y que cómo ya debería animarme a tener los míos.
Sin embargo, luego de ver este post he decidido que eso no es para mí.
1. Puedes ver todos los programas que quieras sin ninguna distracción

2. La única cosa con aspecto a curry sólo la verás en tu plato

3. Nadie te gastará ese costoso maquillaje
